La historia de Eton Eton comienza con los fundadores David y Annie Pettersson. Durante la Gran Depresión de la década de 1920, el aserradero de la familia se vio obligado a cerrar. David comenzó a trabajar junto con su esposa Annie, quien dirigía un pequeño taller de confección desde su hogar. La empresa comenzó a expandirse y se estableció como "Skjortfabriken Special" (La Fábrica de Camisas Especial).

Durante una visita de rutina, el entonces CEO de Eton descubrió un material resistente a las arrugas escondido en uno de los proveedores de la empresa. El material era bastante gomoso y totalmente inadecuado para la confección. La industria de la confección en su conjunto era, quizás no sorprendentemente, escéptica hacia este nuevo material, mientras que Eton estaba convencido de que ahí residía el futuro de la producción de camisas. Junto con varios especialistas en textiles, este material singular se convirtió en la fórmula secreta de Eton para camisas sin plancha, siendo un éxito inmediato.